La virgen
de Guadalupe y su relación con la
Tonantzin:
El más
elevado sentimiento de protección materna se muestra en el pasaje en que la
virgen sale al encuentro de Juan Diego,
ella le dice: No estoy yo aquí que soy
tu madre? No estás bajo mi sombra y mi resguardo? No soy tu alegría? No estás
en el hueco de mi manto y mi regazo?A su vez, Juan Diego se dirige a la virgen
con gran respeto y reverencia, la llama “mi señora, mi niña, la más pequeña de
mis hijas”. Así pues, el encuentro entre la virgen de Guadalupe y Juan Diego,
denota un vínculo de fraternidad, de amor maternal. La virgen es la madre que
se preocupa y procura el bienestar de sus hijos, “mis amores “como les llama, y
en particular a Juan Diego, quién ha escogido para cumplir su misión.
La semejanza
de elementos religiosos entre la virgen de Guadalupe y la Tonantzin es notoria.
En esencia es notoria, ambas son entidades divinas y son madres .Toci, es la
madre, diosa de la fecundidad, la virgen de Guadalupe, sin ser una diosa,
representa la fecundidad justamente porque es madre.
El contraste
entre ambas radica en el carácter; Toci, como representante de la tierra crea y
a la vez destruye, es guerrera, mientras que la virgen de Guadalupe es amor y
bondad. Pero esto tiene su explicación en la naturaleza de ambas deidades: Toci
es la tierra, mientras que la virgen representa a un ser humano divinizado.
Ambas, sin
embargo, son creadoras de dioses. Mientras que Coatlicue, da vida al sol, la luna y a las estrellas, la
virgen de Guadalupe da luz a Jesucristo. Como diosas tienen un lugar trascendente
en la existencia, ya que dominan sobre el aspecto femenino de la vida, sobre la
maternidad, en esencia. Por tanto, están dotadas de gran fuerza y capacidad
para procrear, cuidar y proteger a sus hijos. Ambas, en síntesis, representan
el sustento espiritual, indispensable para la existencia. Los estudiosos de la
historia del guadalupanismo sostienen que esta relación obedece a un
“sincretismo cultural”, en otras palabras, que la cultura vieja (la indígena)
adopta elementos de la cultura nueva (la española), que son similares a los suyos, como una forma de
perpetuar sus creencias. Actualmente se cuentan por miles las personas que acuden a la Basílica para rendir
culto a la virgen de Guadalupe. Entre ellos, indígenas de diversos puntos de la
república acostumbran realizar diversos ritos en su honor, como danzar en el
atrio o llevarle presentes. Esta manifestación se asocia con los cultos
antiguos que se realizaban en el Tepeyac en honor a la Tonantzin.Es posible,
entonces, que las culturas antiguas convivan, con la nueva, del mismo modo en que
conviven, aunque apartados cada quien en su mundo, los indígenas, los mestizos
y los criollos en una misma época.
Virgen
de Guadalupe: Imagen sobre ayate, de
origen divino 1.47m.
Tonantzin: Escultura prehispánica, cultura azteca y otomí Peso: 60.00
kg., 2.10m 1.05m.
No hay comentarios:
Publicar un comentario